Una de las provincias españolas menos conocidas desde el punto de vista ecológico es Albacete, toda vez que presenta espacios poco divulgados pero de incuestionable interés. Por ello, os propongo esta interesante ruta entre Ojos de Villaverde y Fábricas de San Juan de Alcaraz a lo largo de 66 kilómetros; se puede realizar en un día.
Esta ruta nos permite conocer una de sus formaciones lacustres y adentrarno en el sector montañoso que enlaza con las serranías andaluzas de Cazorla y Segura. Partimos de la laguna Ojos de Villaverde, donde sobreviven avutardas, nutrias y jabalíes.
Luego, nuestra siguiente parada es Robledo, que no puede abandonarse sin visitar la iglesia parroquial de la Purísima Concepción, todo un hito albaceteño.
A renglón seguido, muy cerca de Alcaraz, el santuario de Nuestra Señora de Cortes. Continuando por la carretera N-322 y después de tomar una desviación se alcanza Salobre, pequeña localidad de la que arranca una pista forestal que, bordeando el río Ojuelo, nos conduce al cerro de la Atalaya, dentro ya de la bonita sierra de Alcaraz.
Después, por un camino de panorámicas inolvidables se llega a Riópar, villa en estado de semiabandono encaramada a considerable altura, que conserva la iglesia gótiac del Espíritu Santo y restos de un castillo árabe.
Son muy conocidas las fábricas de Riópar, fundadas por un empresario austríasco en el siglo XVIII para la fundición de metales. A unos seis kilómetros de esta localidad albaceteña nace, en los denominados Chorros del Mundo, el río del mismo nombre, cuyo curso se precipita en cascadas de gran belleza.
Por úlitmo, entorno a los edificios fabriles creció el núcleo contiguo de Fábricas de San Juan de Alcaraz, que absorbió la población que abandonaba Riópar. Así habremos completado un interesante recorrido por varias zonas más desconocidas de la provincia de Albacete.
Foto vía Turismo Castilla -La Mancha