El Real Monasterio de Santa María de Guadalupe se encuentra en la localidad de Guadalupe, en la provincia de Cáceres (Extremadura). Este monasterio fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1993. El edificio posee grandes proporciones y en él se alternan elementos góticos, mudéjares, renacentistas e incluso barrocos.
Los monjes jerónimos se hicieron cargo del monasterio desde sus comienzos hasta el año 1908, momento en el cual pasó a pertenecer a los franciscanos. Es el monumento más emblemático de la villa, se alza en el centro de la misma y en torno a él comenzó a ordenarse esta población cacereña.
La visita al Real Monasterio de Santa María de Guadalupe dura unos sesenta minutos . Se realiza con el acompañamiento de un guía que acompaña la visita hasta el Camarín de la Virgen, donde un fraile franciscano de la Comunidad de Guadalupe muestra el Camarín y la imagen de la Virgen de Guadalupe. El horario de visitas es de 9.30 a 13.00 y de 15.30 a 18.30 horas.
El monasterio fue fundado en 1340 por Alfonso XI, en agradecimiento a la Virgen María que le había ayudado a ganar una importante batalla. La leyenda afirma que la importancia religiosa del emplazamiento fue revelada por un campesino que, mientras buscaba una vaca extraviada, tuvo una visión y descubrió una estatuta de la Virgen, esculpida por San Lucas.
Con el paso del tiempo, se construyeron tres hospitales, una escuela de Medicina y una farmacia. También se añadió al conjunto una de las mayores bibliotecas de España. Sin embargo, fue cuando los conquistadores del Nuevo Mundo escogieron Guadalupe como su su santuario y llevaron allí tesoros del Nuevo Mundo cuando se convirtió en el lujoso edificio que podemo ver ahora.
El monasterio de piedra, con sus almenas y sus torres, es magnífico. Desde su ubicación elevada en una colina se yergue sobre el pueblo que se construyó a su alrededor. Hoy en día el monasterio es una fundación franciscana y los siguen visitando miles de peregrinos cada año.
Foto vía Parroquia Santa María Magdalena