San Martín de Trevejo es una bella localidad (Cáceres, Extremadura), ubicada en la Sierra de Gata entre Las Hurdes y la frontera portuguesa. Se encuentra enclavado en un valle a los pies del monte Jálama.
San Martín de Trevejo ha sido designado «Bien de Interés cultural con la categoría de Conjunto Histórico», debido a la buena conservación de su arquitectura.
La vivienda tradicional de esta población destacar por tener al menos dos alturas y una planta baja o bodega donde se guardaba el ganado. Sobre esta planta baja, se alzan, sobre un entramado de madera y adobe, las otras dos plantas que son la vivienda y el desván. Para entrar al primer piso, antecediendo a las escaleras interiores, suelen haber poyos de cantería. Junto a estas viviendas se pueden ver varias casas señoriales con sus correspondientes escudos de armas.
Entre las casas señoriales, sobresalen el palacio de los Ojesto, que tiene grandes dimensiones y esconde restos arqueológicos en su interior, y la casa del Comendador, edificio que presnta una sobria fachada de granito con puerta dovelada.
Por otro lado, la plaza Mayor de San Martín es una armonía horizontal de blancos y grises, de cal y de granito, con apuntes de madera en los soportales y de hierro en los balcones. En uno de los lados, se alza la citada casa del Comendaro y en otro la torre campanario de la antigua iglesia, que luce el escudo de Carlo V y fue cárcel. En el centro, destaca un pilón de agua construido en 1888.
Desde la plaza se llega a la iglesia parroquial de San Martín de Tours, templo que se terminó a mediados del siglo XVIII. El convento de San Miguel es otro de los monumentos singulares. Fundado en el siglo XV y bendecido por San Francisco de Asís en su visita a la comarca, acogió estudios de Teología y de Gramática.
Por último, la calzada romana sale de lo más alto del caserío y asciende, entre higueras y bancales, hasta el puerto de Santa Clara.
Foto vía Objetivo Extremadura