Javier es una villa y municipio de la Comunidad Foral de Navarra, situado en la merindad de Sangüesa, en la Comarca de Sangüesa. Es famosa por ser la villa que vio nacer a San Francisco Javier, en el castillo homónimo.Además, Javier es en Navarra sinónimo de castillo.
Esta villa y su castillo se incorporan a Navarra en 1223, cuando Sancho VII el Fuerte los recibió como garantía de un préstamo del infante Fernando de Aragón. La iglesia de Santa María es un edificio del siglo XVIII en el que se conserva, según la tradición, la pila bautismal de piedra, de estilo tardogótico, en la que fue bautizado San Francisco Javier.
La visita al castillo de Javier es conveniente realizarla con uno de los guías que los jesuitas ponen a disposición del curioso, pues las distintas dependencias están íntimamente relacionadas con la vida del santo. Así, el sonriente Crucificado (del gótico final, de influencia francesa) que preside una capilla con pinturas murales que representan una impresionante Danza de la Muerte, con esqueletos amarillos sobre fondo negro.
La torre homenaje del castillo está dedicada a San Miguel y se levanta sobre la roca viva, probablemenet en el lugar donde la fortaleza (restaurada en el año 1890) era un simple atalaya o torre de señales medieval que alertaba de las incursiones en la zona.
Además, hay que conocer las javieradas, uan peregrinación deportivo-religiosa que entronca con la vida itinerante del santo. Se hacen en marzo y teiene como meta el castillo de Javier. Convocan a todo tipo de personas que vienen caminando por sendas y carreteras para terminar etapa en Sangüesa.
El último día, que es domingo, se completa el trayecto hasta Javier con un Vía Crucis, que culmina con una misa solemne en la explanada que se alza frente a la fortaleza. Después del esfeurzo, las costilladas y el clarete se multiplican por doquier.
Foto vía Santuario de Javier